domingo, 24 de agosto de 2014

SE VIENEN LAS ANTENAS

Por los amplios efectos encontrados, recomendó “evitar en lo posible el uso del teléfono celular por los niños y también en mujeres embarazadas, y evitar acciones o propaganda comercial que incentiven el uso del teléfono por niños, tales como diseños infantiles de los dispositivos y juegos infantiles incluidos en dichos dispositivos, que incentivan el uso”.

LAS ANTENAS URBANAS DE TELEFONÍA TENDRAN VÍA LIBRE
Fundavida
cellphone-radiation7
La Secretaría de Comunicaciones de nuestro país informó que se firmó un convenio para establecer un mismo modelo regulatorio para que los municipios implementen la instalación de antenas y unifiquen la legislación municipal.
El convenio apunta a resolver el problema de  las empresas de telefonía que encuentran resistencia a la instalación de nuevas antenas en algunos distritos porque la ciudadanía se resiste a aceptar estas fuentes de emisión de ondas cercanas a sus domicilios dado que cada vez con mayor certeza se las considera responsables de graves afectaciones a los seres humanos.
La medida adoptada en Argentina apunta a resolver el problema de las multinacionales que manejan los sistemas de telefonía celular pero no tienen en cuenta los reclamos cada vez más fuertes y fundados de los consumidores.
En España por ejemplo estas empresas acaban de obtener la sanción de una nueva Ley de Telecomunicaciones que  permite a los operadores telefónicos usar o expropiar las azoteas de propiedades privadas y públicas instalando cables en el interior o exterior, prácticamente sin atender las razones de los propietarios que se oponen, ahora las compañías telefónicas podrán instalar en ese país sus antenas en cualquier azotea privada o de uso común, designándola ante el Ministerio de la Industria como “servidumbre de paso especial”.
Centenares de miles de españoles han comenzado a juntar firmas porque una investigación de 2006 citado por la plataforma Contaminación Electromagnética del país, indica que en las personas que vivieron en la zona de los 400 metros de una antena durante algo más de tres años, “hubo más del triple de casos de cáncer”.
Un estudio del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, detalló en la década pasada un conjunto de evidencias de los efectos electromagnéticos de la telefonía móvil, tanto a nivel celular, como casos de leucemia en niños y mayor número cáncer después de unos 10 años.
Un viejo conocido de Gualeguaychú, el Dr. Andrei Tchernitchin, Director de Medio Ambiente del Colegio Médico en Chile, explicó que los más afectados son los niños y las mujeres embarazadas. Un estudio sobre el tema se presentó años atrás a las autoridades del país, justamente para que se regulen las leyes en base a los riesgos de salud.
Los teléfonos móviles emiten radiaciones electromagnéticas de altas frecuencias para la transmisión de voz y datos hacia las antenas repetidoras y ondas electromagnéticas de bajas  frecuencias, asociadas a la funcionalidad del aparato telefónico mismo. En el estudio se determinaron distancias de las antenas en las que se encontró perjuicios en la salud.
Destacó Tchernitchin, quien hace años aportó a la Asamblea de Gualeguaychú los informes de los daños de las pasteras chilenas, que las ondas de alta frecuencia tiene efectos que tardan en presentarse de 10 a 20 años. Al aplicar las mismas radiaciones a seres humanos y animales, se observó en los primeros un aumento de temperatura en la cabeza y en los animales, con el tiempo, un aumento de linfomas.
El médico recordó además del gran riesgo del uso de los aparatos. Su investigación junto a un equipo destacado, incluyó experimentos propios y citas de otros estudios.
“Han advertido que las posibles consecuencias a corto y largo plazo para la sociedad de exponer a los niños a la radiación de microondas de los dispositivos de comunicación celular debe ser reconocida responsablemente a nivel mundial”, declaró el Dr. Tchernitchin.
Por los amplios efectos encontrados, recomendó “evitar en lo posible el uso del teléfono celular por los niños y también en mujeres embarazadas, y evitar acciones o propaganda comercial que incentiven el uso del teléfono por niños, tales como diseños infantiles de los dispositivos y juegos infantiles incluidos en dichos dispositivos, que incentivan el uso”.
Se observó además que la radiación actúa en la proteína supresora de tumores causando una acción toxica en los genes. Y se demostró que los  “los campos electromagnéticos emitidos por teléfonos celulares alteran los electroencefalogramas”, principalmente durante actividades que involucran la memoria.
Sin embargo las evidencias científicas y la resistencia ciudadana no son tenidas en cuenta por las autoridades que si están prontas a aceptar los requerimientos de estas empresas que conculcan impiadosamente derechos individuales.
Todos exigimos mejores servicios de telefonía celular pero no queremos las antenas cerca, lo que en sí mismo se puede leer como una contradicción, pero lo que permitiría un debate social maduro en este tema es un Estado que investigue e informa la verdad para que la ciudadanía decida y no un estado que solo se tuerce para el lado de los intereses económicos de estas empresas, las que mayores beneficios obtienen en relación al capital invertido en el mundo moderno.
www.fundavida.org.ar

No hay comentarios:

Publicar un comentario